22 de enero de 2013

LA TERESINA K4. Montserrat [Vía Ferrata]

[Enero 2013]

Aprovechando un lunes libre, planeamos una salida a la montaña de Montserrat, concretamente a la vía ferrata conocida como La Teresina.

La Teresina es una vía ferrata mítica. Es clásica por excelencia, pues fue la primera que se instaló en España, con fecha en 1993, por el escalador Antonio García Picazo.
En sí, la ferrata se desarrolla subiendo de la ermita o refugio de Santa Cecilia hasta el mirador de Sant Jeroni, cima de Montserrat.
Combina camino con numerosos puentes de roca y progresión sobre placas de roca totalmente expuestas de la cara norte, finalizando en una delicada chimenea que nos deja justo en el mirador. La sensación de vacío está garantizada. Requiere cierta experiencia y físico y no es recomendable si no se tienen.

He de decir que, en mi opinión, confirmo se trata de una ferrata difícil, más que por la dificultad, por la tremenda exposición, el físico de los pasos y la escasez de equipamiento . El equipamiento, como digo, se encuentra restaurado, pero denota un estilo minimalista y en algunos puntos cierto deterioro (algún cable suelto, grapas dobladas, parabolts del cable que se mueven...) debido al uso y al constante caer de piedras y rocas por las paredes.

[Fuente: muntanya.planasantich.org]


[Fuente: deandar.com]

Salimos con retraso, a eso de las 11:30h del párquing de la ermita de Santa Cecilia, graso error que nos perjudicará más tarde, pues se nos hará de noche. Alcanzamos el pie de la vía ferrata sobre las 12h, nos hemos entretenido viendo las cabras por la canal de Sant Jeroni. 
La aproximación es muy sencilla, partiendo de un camino des del párquing, que deja una torre de electricidad a la izquierda y se adentra torrenteando a la Canal de Sant Jeroni hasta que se bifurca, nosotros siempre a la derecha siguiendo las marcas azules. 

[Indicaciones en la aproximación: Flechas naranjas y marcas azules]

Una vez encontramos la marca "V.F." la Teresina continuará siempre a la derecha. No continuar recto, pues esa es la vía El Mejillón, de dificultad Muy Difícil.
Se llega sin problemas si se sigue las indicaciones primero naranjas (flechas) y luego las marcas azules. El inicio de la Teresina es evidente con la falta de la primera grapa.

[Equipados y listos!]

Empieza una subida entre camino y resaltos de roca, así como un pequeño diedro, con ayuda de cadenas, cable y alguna grapa, hasta el primer paso aéreo: el puente de roca, muy expuesto -donde hace poco se ha instalado una variante con puente nepalí-. Preferimos el paso aéreo, que realmente quita el hipo: espectacular sensación de vacío. 

 
[Soraya superando el puente de roca]

Una vez superadas las grapas y pasado el puente de roca se asciende por la placa con ayuda de cadena, cable y grapas. A partir de aquí el ascenso es bastante mantenido hasta Santa Cecília, un precioso mirador a cientos de metros en vertical. 

   [Subida mantenida por la placa, pasos muy aéreos y expuestos]

[En el mirador de Santa Cecilia, rodeados de 300m de caída vertical]

[Vistas]

A partir de aquí la cosa se suaviza medio llaneando, con ayuda de cable en los pasos más complicados y expuestos, hasta la chimenea final. Antes hay que descender una especie de rápel con minigrapas de unos 20m, que preferimos rapelar con la cuerda para menor riesgo. 

[Apunto: Después de bajar de Santa Cecilia se presenta en las indicaciones de la ferrata un "rápel de escape", nada aconsejable, para volver al camino y a la carretera. Solo planteable para quienes tengan mucha experiencia en rápeles y una cuerda de más de 70m! Descenso en 6 tiradas muy largas y expuestas.]

Continuando la ferrata, ya solo queda el camino, que se va aproximando al pie de la aguja de Sant Jeroni, hasta la chimenea, donde ya distinguimos el mirador. 

 [La famosa chimenea final que da al mirador de Sant Jeroni] 

La chimenea es un diedro que impresiona tal y como te aproximas. Una vez dentro, cargamos fuerzas para la traca final. Se asciende tirado de brazos y cadenas primero, y luego con ayuda de algunas grapas, combinando todo el tramo técnica de oposición, pues el paso es muy estrecho.
A nosotros se nos complica por las prisas, está anocheciendo, sopla un fuertísimo viento del norte muy incómodo en este punto y el frío de la noche apreta. Nos ayudamos de la cuerda para salir seguros de este último paso, controlando los nervios por la tensión de quedarnos sin luz.

Una vez se sale de la chimenea te encuentras justo delante del mirador de Sant Jeroni, punto más alto de Montserrat, a 1236m. Aquí finaliza la vía ferrata.

 
[Llegamos justo al anochecer... ¡ por los pelos!]

[Entre satisfacción y apuro, pues aún hay que bajar]

[Emocionados ya a salvo, en tierra firme, fuera de la trampa que puede ser la ferrata a oscuras]

No nos ha supuesto una excesiva dificultad técnica, pero el horario invernal hace que apuremos demasiado el tiempo, hayamos ido con prisas y que justo nos anochezca en la chimenea. Para el descenso preferimos descender hasta el Monasterio y seguir la carretera hasta Santa Cecilia, más fácil a realizar a la luz de una linterna.

[Con esta luz llegamos al párquing de Santa Cecilia]



21 de enero de 2013

Fabricación de casco para escalada y vías ferratas

Esta vez, vamos a fabricar -o más bien montar- un casco destinado a deportes de montaña tales como el alpinismo, la escalada, vías ferratas, etc.

Existe en el mercado una gran variedad de cascos, de todos los colores, diseños, con una amplia gama de  precios, más o menos ligeros y de marca más o menos reconocida.

[Uno de los modelos más asequibles, "Rock Star" de Camp. Precio aprox. a partir de 40€]

Con los tiempos que corren, lo que a nosotros nos interesa es ir bien equipados, con un equipo probadamente seguro y que cumpla las garantías de seguridad (homologación), pero que a su vez, salga bien de precio.

Igual que sucede con la mayoría de material técnico, nos encontramos ante el dilema del precio. El precio de cualquier elemento tiende a ser elevado. Cualquier casco técnico cuesta sobre los 50€, siendo difícil encontrar algo decente por menos cantidad. ¿A qué se debe? En gran medida a la marca: hay que pagarla.

Un casco no es más que un trozo de plástico inyectado, diseñado y probado para que aguante el impacto de piedras o el golpeo de nuestra cabeza contra la roca, entre otros. Deberá contar con una cinta que lo sujete a nuestra cabeza (tipo mentonera) y debe resultar cómodo y ligero, puesto que lo vamos a llevar puesto durante horas. Con esta idea en mente nos disponemos a montar nuestro casco casero "low cost".

Podemos obtener directamente un casco de trabajo en altura, tipo EPI (equipo de protección individual en el trabajo), que cumplirá de sobras la función que necesitamos, y por un precio de 15€!

[Casco tipo EPI de trabajo de altura. Precio aprox. 15€]

La otra opción que planteo es obtener un casco tipo EPI estándar de plástico inyectado -el de obra de toda la vida- y instalarle una mentonera que lo sujete a nuestra cabeza, de forma muy sencilla:

MATERIAL

  • Casco sencillo de seguridad. (EPI, el de obra de toda la vida)
  • Cinta / Mentonera de algún viejo casco de bici
  • Goma-espuma adhesiva

El proceso es tan sencillo como adquirir un casco en una tienda de seguridad laboral o ropa de trabajo. Existe gran variedad de cascos tipo obra, de plástico inyectado y homologados a un precio muy asequible (entre 5 y  10 €), incluso regulables, opción más que recomendable.

Una vez hayamos conseguido el casco adaptaremos con algo de goma-espuma adhesiva, la zona de sujeción para que resulte más cómodo. Nos fijaremos sobretodo en las rebabas del plástico, y zonas de roce con nuestra piel. Cuando más acolchado más cómodo.

Por último colocaremos una mentonera para que el casco quede sujeto a la cabeza. Ésta puede ser reciclada de algún viejo casco de bici que ya no usemos, o la podemos hacer con una cinta y una hebilla. Sólo habrá que pasarla por la estructura interior que nos sujeta el casco a la cabeza y asegurarnos de haberla colocado correctamente para que cumpla su función.

[Casco tipo EPI de trabajo estándar con mentonera y acolchado caseros. Precio aprox. 7€]

Tan fácil como ésto, con un poco de ingenio nos hemos montado nuestro propio casco, indispensable para la mayoría de deportes de montaña y nos hemos ahorrado unos cuantos euros.


Para terminar, decir que la seguridad no debe tener precio, y por tanto no ha de ser el precio del material quien merme seguridad. Como siempre desde este blog intento dar ideas para todos, de modo que, sea cual sea nuestro bolsillo, éste no limite nuestra afición y la haga un poco más segura para todos.